Siempre había pensado que el concepto de clínica dental estaba equivocado: paredes blancas, fluorescentes, colores helados, espacios impersonales, recordándonos siempre un ambiente hospitalario.
Este concepto en nuestro espacio tenía que cambiar. La visita al dentista de por sí, genera miedos. Por eso hemos querido crear un espacio que se aleje de este concepto creando una clínica más amable, donde el paciente se sienta como en casa.
Tuvimos la suerte de contar con la arquitecta Cinta Masdeu para hacer realidad nuestro proyecto, enseguida captó la esencia que queríamos transmitir. El principal protagonista de la clínica es la madera naturaleza, que nos ayuda a crear un ambiente más cálido y a perder el miedo.
En la misma sintonía, el mobiliario de la clínica es el que podríamos encontrar el cualquiera de nuestros hogares. En cuanto al equipamiento, nos hemos dotado de las mejores instalaciones, para poder ofrecer la excelencia a nuestros pacientes. En esta línea, el sillón dental está fabricado de espuma viscoelástica adaptándose a la anatomía del paciente y ofreciéndole un mayor confort.
Esperamos que se sienta como en casa y dejar de lado sus miedos.
