Sheila Martín Dental

Kids

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Es muy importante que los niños crezcan con una boca sana. Por eso, es tan importante llevarlos al dentista desde pequeños. Desde nuestra clínica, os ofreceremos todas las herramientas para el cuidado de la salud bucal de sus hijos.

Por eso hemos creado este espacio, Kids, para que el dentista sea un lugar amable y sin miedo para ellos, teniendo conciencia de la salud buco dental desde pequeños.

Muchas veces, no damos la importancia que merecen los llamados dientes de leche. Estas, tienen múltiples funciones. Una de las más importantes es que son la guía para que los dientes definitivos salgan al lugar adecuado. El hecho de perder un diente de leche antes de tiempo puede suponer problemas en el correcto desarrollo del niño.

La prevención es fundamental para evitar problemas mayores. Por ello, estableceremos el riesgo individualizado de cada niño y, a determinar la regularidad de las visitas junto con las pautas a seguir, dependiendo de cada paciente. Además, hay que tener en cuenta que es responsabilidad de los padres cuidar el cepillado de los niños hasta aproximadamente los 9 años.

En su infancia, los padres o tutores, con la ayuda del odontopediatra, son los responsables de transmitir a los pequeños los hábitos adecuados de higiene para que los niños disfruten de un estado buco dental óptimo en un futuro inmediato.

Las visitas periódicas nos ayudarán a que podamos establecer una relación de confianza y al mismo tiempo les sirva de motivación para que cuiden de su salud buco dental.

Todos juntos podemos hacer que ir al dentista sea un hábito saludable y libre de miedos.

Preguntas frecuentes

Sí, por las siguientes razones:

La succión del pecho es una actividad esencial para el crecimiento correcto de su mandíbula y para el buen posicionamiento de su lengua y sus labios. 

Porque los bebes que no han podido lactar o cuyo periodo de lactancia ha sido corto, tienden a compensar su necesidad de succión con el dedo o el chupete. 

Porque los niños con una lactancia materna adecuada presentan menos problemas de malas mordidas que los alimentados con biberón. 

Porque la leche materna contiene anticuerpos, responsables de la defensa de su organismo.

Por la satisfacción y la seguridad que la lactancia proporciona al bebé.

El orificio del biberón debe ser pequeño para limitar el flujo de los senos maternos y lograr que el bebé realice los ejercicios de succión necesarios. 

Intenta dar el biberón con el bebé en una posición vertical para que realice los ejercicios de succión con mayor esfuerzo. 

A partir de la salida de los primeros dientes, evita el biberón de noche. De no hacerlo, debes limpiar su boquita antes que se duerma. 

Recuerda que la leche ya tiene azúcar natural, por lo que no debes añadirle más. 

Si tu hijo necesita ‘juguetear’ con el biberón para quedarse dormido, rellénalo de agua y no con leche. 

A partir del año de edad, intenta que tu hijo beba líquidos de una tacita.

Porque una boca sin caries en la infancia está directamente relacionada con una boca sana en la edad adulta. Si quieres que tu hijo sea un adulto sin caries, ¡cuida sus dientes de leche!

Porque una infección en los dientes de leche puede afectar a los definitivos que se encuentran justo debajo. 

Los dientes de leche mantienen el espacio para que los dientes definitivos salgan de su lugar. 

Los dientes de leche sirven para que tu hijo hable correctamente y sonría sin complejos. 

No, la caries es una enfermedad infecciosa que se adquiere. Se trata de un desequilibrio de las bacterias de la boca, una disbiosis. La aparición de caries depende de muchos factores (poca higiene bucal, alto consumo de azúcares, transmisión de bacterias, alimentación nocturna, falta de flúor local, visitas infrecuentes al odontopediatra, etc.).

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